Corindón, ámbar, turmalina, alabastro o malaquita; compuestos que se encuentran en la naturaleza, de química definida y estructura atómica determinada, formados por procesos naturales e inorgánicos.
Los minerales se encuentran como parte de las rocas y se clasifican por su composición química, estructura cristalina y propiedades físicas (como dureza, color o refracción).
Pero más allá de la belleza y singularidad de estas estructuras encontramos efectos y propiedades en cada uno de ellos.
Conceptos como ayuda, protección, energía o serenidad se combinan con formas y colores creando un amalgama sorprendente de efectos tanto en el plano físico como en capas más profundas de nuestro propio ser.
Aprendamos a ser nosotros mismos y brillemos con luz propia. Y si para ello necesitamos algún empujón extra contemos con la resonancia y energía de sus vibraciones.
A Gloria
Formulando nueva dosis informativa
¡Qué ilusión!
Realmente los minerales nos aportan muchas otras cualidades además de ser muy bellos.
Gracias a mis estupendos vecinos, Ana, ¡eres lo más!
Gracias a tí Gloria, nuestra ilusión es que os gusten las publicaciones.