El ser humano, como dijo Gurb, es la chapuza más grande del universo. Nuestra máquina perfecta se deteriora poco a poco de forma inexorable y sin que podamos evitarlo.
Al tener algún problema de salud acudimos al médico y nos prescribe, cuando considera oportuno, un tratamiento que intentamos seguir de manera más o menos ordenada (quien no recuerda haberse olvidado esa toma de antibiótico o no ponerse la crema las veces que tendría que hacerlo). Aun así nos hemos curado.
Pero con el tiempo el tratamiento se cronifica y debemos ser más constantes y escrupulosos siguiendo a rajatabla horarios y tomas para conseguir el equilibrio y convivir de forma pacífica con nuestro pequeño fallo de sistema.
Si por cualquier motivo estas pautas son difíciles de conseguir o mantener necesitamos algún apoyo adicional para facilitar este proceso.
Uno de los servicios que ofrecemos en la farmacia es la preparación semanal de la medicación de aquellos pacientes crónicos que lo necesitan o lo solicitan.
Se denomina sistema personalizado de dosificación (SPD) y sirve, entre otras cosas, para mejorar el cumplimiento terapéutico, es decir, que las tomas sean a las dosis y horas correctas.
Además ofrecemos a los pacientes del programa un seguimiento y trazabilidad constante de su medicación manteniendo contacto con los médicos de cabecera y ajustando las posologías cada vez que se considera necesaria una modificación (cambios en la prescripción por efectos secundarios, mejoras en el tratamiento o ingresos hospitalarios, por destacar algunos de los más frecuentes).
A todos los pacientes del programa y sus familias: los que estuvieron, los que están y los que estarán.
Formulando nueva dosis informativa
Molt ben pensat, i fet.
Moltes gràcies. Tenc un parell d´assesors que no me´n deixen passar ni una.
Amb diferència sa millor farmàcia de s’illa!!! I per suposat gran equip!!!