Las sopas de arroyo que aparecen en los libros de aventuras del hidalgo Don Quijote mucho tienen que ver con los cantos rodados que recogió David del río para luchar contra el gigante Goliat.
La pericia con la que éste lanza las piedras contra su objetivo, consigue acabar con su oponente de un tiro certero y adecuado al alcanzarlo de pleno en la cabeza.
Destreza, conocimiento y superioridad en un asunto siempre representan una responsabilidad; entendámosla correctamente utilizando estas habilidades de la mejor manera posible.
Todos tenemos nuestro particular Goliat, vayamos sin miedo a por él!
A Valle.
Formulando nueva dosis informativa