Fenómeno astronómico que acontece en mayor o menor medida todos los veranos, se trata de un conjunto de meteoros y estrellas fugaces que surcan el cielo en estas noches calurosas.
Todo un espectáculo de gran belleza que representa las lágrimas que vertió San Lorenzo al ser quemado a la parrilla en su martirio.
Respetemos el descanso del guerrero y dediquémonos a su contemplación.
Formulando nueva dosis informativa